
Sí mató Salvador Vega de sendas estocadas magníficas, pero apenas pudo torear. Sólo algunos lances con arte al cuarto toro de José Luis Pereda, un manso sin ritmo y muy molesto. Al primero, de un descastamiento horrible, tampoco le dejó hacer lo que sabe.
Pena y sanger para Miguel Angel Delgado. Entendió bien a un toro manso, ganando el paso en vez de perderlo para que el de Pereda no huyera, hasta que la falta de bravura del enemigo puso las cosas imposibles. Se las ingenió peor contra el quinto, cinqueño y con un pitón derecho de pavor. Fue una cuestión de falta de oficio ante un toro áspero y bruto. Sólo en la primera serie al natural, desde muy larga distancia, M. A. Delgado pudo engarzar un toreo un toreo limpio y largo. Luego cambió de pitón y acortó la distancia, y los topetazos del oponente alcanzaron muchas veces la muleta, y también al final el muslo del torero, que se cruzaba con el engaño retrasado creyendo que el toro estaba dominado, cuando en realidad era el que mandaba en la pelea. Ensangrentado y renqueante sigió toreando y lo mató con honbría y dignidad.
Parte médico de Miguel Angel Delgado: "Cornada en la cara interna del muslo derecho de 15 cms. hacía arriba y de 10 cms. hacia fuera que rompe fibras musculares del cuádriceps. Pronóstico menos grave." Fdo. Dr. Ramón Vila.
Real Maestranza de Sevilla. 10 de abril. 2º de la Feria de Abril. Dos tercios de entrada.
Toros de José Luis Pereda, mansos, sin clase y con peligro.
Salvador Vega: ovación y silencio.
Miguel Ángel Delgado: ovación y ovación tras aviso.
Miguel Tendero: ovación tras aviso y ovación.
Imagen: Miguel Tendero toreando al natural.
No hay comentarios:
Publicar un comentario