Los toreros que aburrían a los toros, en Castellón.

Cayetano hizo lo mejor con el sexto, pero fue el único que se quedó sin premio por su fallo con los aceros. Y no es que en los otros casos acertasen de pleno. Dos orejas por dos estocadas bajas y poco toreo para el recuerdo. Pero como el público manda, "El Fandi" y J.M. Manzanares se embolsaron un trofeo.

El torero alicantino tiene más clase y empaque que medio escalafón junto, pero no se encajó ni por equivocación. Y eso que tuvo enfrente al mejor ejemplar de toda la corrida de Luis Algarra, que lidió un conjunto tan noble como carente de casta y fuerza. El don artístico de Manzanares asomó por momentos, aunque sin asentarse. Su infalible espada se cayó y provocó derrame, pero su efectividad le puso en bandeja una oreja. El quinto se pegó un volatín y acabó con el cuello lisiado. Manzanares hacía gestos de que tenía problemas de visión. El veterinario no lo dudó, vuelta a corrales. Menuda birria de sobrero, descastado hasta decir basta. El torero dibujó tres hermosos naturales, muy lentos.

El otro galardón lo cosechó "El Fandi" con el toro inicial. Pobre animalito, hasta tres veces tuvo que aguantar chicuelinas ¿es mucho pedir un poco de originalidad?. Con las banderillas puso la plaza a revientacalderas. Tras el par al violín, recorrió medio anillo parando al toro, que tenía en sus dos puntas y viaje ovejuno. Y eso que con este toro, tan bondadoso como blando, dejó pasajes con templanza. Pero como aquello no transmitía lo más mínimo, recurrió a sus repertorio de rodillazos y desplantes. Menuda imagen de la Fiesta, con los subalternos tirando de los pitones para levantar al burraco cuarto. Faena aburrida como una ostra, aunque del efectivo bajonazo aupó la pañolada. Bravo por el presidente por impedir una salida a hombros de tan poco argumento.

Las escenas de mayor calidad brotaron de las muñecas de Cayetano con el último cartucho. Después de que con el tercero no hallara lucimiento, salió decidido al exto, justo de todo. Vibrante el saludo con el capote, que tomaba bien. Dispuesto, se arrodilló frente al toro. Trató de templar a derechas la rebrincadita embestida por las mermadas fuerzas. Lo más sobresaliente llegó en una serie al natural; sereno, templado, con las zapatillas hundidas imprimiendo gusto. Pinchó, pero ahí quedó lo mejor de una tarde en la que se aburrieron hasta las ovejas.

Plaza de Toros de Castellón. 13 de marzo. 7º de feria. Tres cuartos largos de entrada.

Toros de Luis Algarra, desiguales de presentación, nobles y faltos de raza y casta.

"El Fandi": oreja y saludos tras leve petición y bronca al presidente.
Jose María Manzanares: oreja y saludos.
Cayetano: silencio y ovación.

Imagen de Cayetano esperando la salida del tercero de la tarde.